En una entrevista por Radio Eco, Fernando Pierucci, jefe de ambiente del Grupo Quimiguay y docente en la nueva Diplomatura en Tratamiento de Residuos Peligrosos de la UTN, insistió en la necesidad de incrementar el porcentaje de residuos industriales que reciben un tratamiento adecuado. “Es clave concientizar, controlar y acompañar a las empresas en ese proceso”, remarcó.
Gustavo Grimaldi, conductor del programa de radio Business Plan por radio Eco, entrevistó a Pierucci para profundizar sobre unos datos que alertan: el último informe realizado en conjunto por la Universidad Nacional de Rosario (UNR) y la UBA advierte que, de las 12 millones de toneladas anuales de ese tipo de desechos, sólo 1 millón de toneladas reciben un tratamiento adecuado.
A continuación compartimos algunos de los conceptos e ideas claves planteadas por el especialista:
“Los datos del relevamiento son alarmantes. En el sector veníamos estimando cantidades, pero no estos resultados. Ese tipo de residuos se llama peligrosos porque puede causar daño y contaminar si no son gestionados de forma adecuada”
“La pandemia afectó la producción en general y en consecuencia también la gestión de los residuos. Ahora se viene normalizando esta situación y estamos volviendo a los números anteriores a la pandemia, pero partiendo de un piso mínimo de tratamiento”.
“En los países desarrollados hay mayor concientización, pero eso no significa que acá no esté en agenda. Lo vemos en la agenda de la industria, de la sociedad, de los municipios. Desde Grupo Quimiguay fomentamos esa concientización a través de programas como Puertas Abiertas o el de recuperación de aceites y lubricantes ALU y notamos esa preocupación, la necesidad de trabajar este tema”.
“Hoy hay muchas empresas que tratan sus residuos en nuestras 4 plantas. Allí los recuperamos y revalorizamos tomando como eje los pilares de la economía circular. La mayoría de los residuos son tratados para volver al mercado”.
“Para cambiar el panorama actual es muy importante reforzar los controles por parte del Estado y a su vez garantizar el acompañamiento y las herramientas para que las empresas puedan cumplir con la ley”.