A un año y medio del lanzamiento del programa ALU y con mucha satisfacción por el acompañamiento por parte de los municipios, Grupo Quimiguay cerró la campaña de distribución de plantines en Córdoba. Y lo hizo de una manera especial, con la entrega de los árboles nativos al municipio de Mi Granja, lugar donde nació y crece cada día una de las plantas de la empresa.
Se trata de una iniciativa de articulación entre el sector público y privado en la cual la empresa recupera los aceites y lubricantes desechados por los municipios y éstos reciben a cambio árboles para colaborar así con la creación de nuevos espacios verdes. Se implementa en más de una veintena de municipios de Entre Ríos y de Córdoba y en varios organismos públicos.
Tras la distribución de los plantines a los municipios adheridos en Entre Ríos en agosto pasado, el equipo de Grupo Quimiguay Córdoba organizó la entrega de más de un centenar de árboles nativos a los municipios de Mina Clavero, San Marcos Sierra, Oliva y Mi Granja, con un buen resultado final y con la convicción de seguir aunando esfuerzos hacia futuro.
El mal manejo de aceites minerales usados genera grandes riesgos, afecta al suelo, aire y agua, y trae un peligro para la salud de la población. En el caso de los lubricantes, el derrame de un solo litro puede llegar a contaminar un millón de litros de agua. Por eso, el programa ALU es una herramienta eficiente e innovadora para abordar este problema.
Los municipios entregan aceites y lubricantes usados que son recolectados, reciclados y recuperados por el Grupo Quimiguay convirtiéndolos en combustible alternativo y base lubricante listos para su reinserción en el mercado. Este servicio no tiene costo para el ente público, que a cambio del mismo recibe plantines de árboles autóctonos, para colaborar con la creación de espacios verdes en las comunidades.